domingo, 3 de noviembre de 2013

Carpe diem.

Sí, vale. Tengo 16 años ''de mierda'' como dirían algunos típicos ancianos de pueblecillo que se sientan con sus viejos amigos en el parque a criticar estos tiempos que corren. Pero, ¿y qué? Se aprende tanto como desde que naces, hasta el día de tu muerte.Yo, en mi caso, he aprendido a vivir. Cada persona aprende a su manera y yo he aprendido a base de palos. Puede ser bueno o malo, pero he aprendido. No soy quien para decir nada, y menos aconsejar, pero yo en vuestro lugar, no me enamoraría a esta edad. Enamorarse es un sentimiento incontrolable. Yo eso por supuesto no lo discuto, porque como adolescente que soy, me he enamorado más de una vez y no, no se puede evitar. Os aseguro que el amor es a la vez lo mejor del mundo y a la vez lo peor del mundo. Lo bonito del amor es la fase primera. Esa fase de tonteos, risas tontas, orejillas rojas, cotilleos entre amigas, pupilas dilatadas...sí, esa fase. Para mi el amor es esa primera fase y la última. Podría decir que la última es cuando superáis cierta edad, y sólo tienes a tu pareja a tu lado, con vuestros momentos, recuerdos y aventuras vividas. ¿La fase intermedia? Una mierda. El amor deja de ser amor cuando se convierte en rutina, cuando tu felicidad depende de la suya, cuando empiezan a haber inseguridades, desconfianzas, cuando haces el papel de ''mamá'' con tu pareja y te propone ciertas limitaciones. Y a esta edad, esa fase no puede existir, por experiencia propia. Nunca mas vas a tener esta edad, nunca. ¿Si no disfrutas a esta edad cuando? Podéis llamarme ''puta'', ''fresca'' y esos adjetivos que ahora se llevan, pero soy de las que opinan de ir en flor en flor a esta edad, por lo menos hasta tener los 20 y pico largos. Cuando me refiero a flor en flor, quiero decir con rollos, rollos normales o rollos de una noche. Que tu vida se base en los estudios, tus amigas y amigos y las fiestas. ¿Acaso piensas irte de fiesta con 50 años? ¡Claro que no! La vida está para vivirla, y cuando se es joven, más. En resumidas cuentas, carpe diem.